Bad Driburg / Generalato de las Hermanas del Espíritu Santo de Adoración Perpetua de Steyl
En una carta oficial del 25 de febrero de 2015, la Santa Sede ha dado permiso para iniciar el proceso de beatificación de la Cofundadora y primera Superiora General de las Hermanas del Espíritu Santo de Adoración Perpetua de Steyl, Adolfine Tönnies (Madre María Micaela).
El 19 de marzo se recibió el "Nihil Obstat", firmado por el cardenal Angelus Amato. De este modo se abre el camino para el inicio del proceso de beatificación, que primero comienza a nivel diocesano. El 26 de agosto de 2014, con motivo de la celebración del centenario de la casa madre de las Hermanas en Steyl (Holanda), se presentó al obispo de la diócesis de Roermond , Frans Wiertz, la solicitud junto con todos los documentos necesarios relativos a la apertura del proceso.
Adolfine Tönnies nació el 7 de enero 1862 en Horst-Emscher (hoy Gelsenkirchen-Horst). Después de haber completado sus estudios y la formación posterior como profesora en Münster, trabajó durante diez años como profesora en la ciudad del norte de Alemania de Rendsburg. Tuvo deseo de ser religiosa y solicitó la entrada al sacerdote alemán Arnold Janssen, que había fundado en 1875 en Steyl una casa para la formación de los futuros misioneros. En 1891 aceptó a Adolfine Tönnies en la Congregación de las Hermanas Misioneras, que había fundado dos años antes. Cuando en 1896 se fundó una segunda Congregación contemplativa, Adolfine Tönnies fue una de las Hermanas fundadoras de esta comunidad de las "Siervas del Espíritu Santo de Adoración Perpetua", como superiora y más tarde se convertiría en Superiora General. Como Hermana recibió el nombre religioso de María Micaela. A pesar de que vivía en un claustro cerrado, también tenía todo su corazón misionero. Trabajó para el desarrollo interior y exterior de la Congregación y fundó nuevos conventos de adoración en Alemania, los Países Bajos, EE.UU., Filipinas y China. Murió el 25 de febrero de 1934 en Steyl. Hoy en día hay cerca de 350 Hermanas de Adoración de Steyl que viven en 22 conventos en diversas partes del mundo.