El COVID-19 ha sacudido al mundo entero con gran dolor y tristeza, creando un desastre masivo. Hoy todo el mundo está enredado bajo el poderoso control del coronavirus, e India no es una excepción a esta terrible situación. En este momento, nuestro país también está experimentando tremendamente la tormenta más terrible de esta crisis del coronavirus y luchando por salir de esta situación tan agotadora y estresante. En el proceso, se introdujo el distanciamiento social para prevenir la infección por coronavirus, y se impuso severamente a la gente el llamado "confinamiento", lo que ha creado un daño inmenso y un gran desastre en la vida de la gente común, especialmente en los migrantes, empleadas de hogar, recolectores de ropa usada, jornaleros y los trabajadores de la construcción.
El Gobierno de la India impuso el confinamiento total desde el 24 de marzo de 2020, para evitar la propagación de esta enfermedad mortal. Este bloqueo, que llegó como un shock repentino, solo ha agregado problemas y miseria a los migrantes pobres y a las personas marginadas. Tiene un impacto muy fuerte en la vida de los trabajadores migrantes, los trabajadores domésticos y los jornaleros. Las categorías aquí mencionadas no se encuentran bien y llevan una vida de miseria en su día a día. En la actualidad, son personas que iban de un lugar a otro para conseguir una comida al día, y han sido sometidas a muchas pruebas y dificultades para ganarse el sustento cotidiano. ¡Están encerrados adentro sin saber qué hacer para conseguir su pan de cada día, ya que no tienen nada para comer o beber! Están en una condición deplorable e inexplicable.
Los misioneros SVD en la provincia INH no somos espectadores silenciosos ante este doloroso escenario de hambre que padecen nuestros hermanos y hermanas. La situación, que mueve a la compasión, los obligó a ayudar a estas personas pobres. Planearon una estrategia para aliviarlos de sus sufrimientos. El Coordinador de JPIC de la Provincia ha tomado el asunto muy en serio e inmediatamente se puso en acción. A las personas necesitadas y afectadas de los estados de Telangana, Andhra Pradesh y Tamil Nadu se les distribuyeron arroz y alimentos, que serían suficientes durante un mes para una familia. Hemos podido llegar a las personas necesitadas y que sufren en y alrededor de nuestras propias parroquias SVD y lugares de trabajo. Alrededor de 2.500 familias se beneficiaron de la ayuda de emergencia iniciada por la Provincia. La ayuda del coordinador de JPIC, junto con algunos otros cohermanos de la provincia INH que se acercaron a estas personas con arroz y víveres en esta difícil situación, supuso un gran alivio para las personas necesitadas y sufrientes.
También hemos entregado suficiente arroz y víveres a cada familia para aliviar su hambre, y conseguir que vivan felices junto con sus familiares. ¡Nos estamos acercando a estas personas necesitadas para enjugar sus lágrimas y ver una sonrisa en sus hermosos rostros! De hecho, fue un gesto de justicia hacia la humanidad y un gran servicio a nuestros hermanos pobres. Pudimos llegar a estas personas debido a la generosidad de nuestros benefactores, colaboradores y personas de buena voluntad. En este momento, solo puedo recordar las palabras de Jesús: “Cada vez que lo hicisteis con uno de estos, mis hermanos más pequeños, conmigo lo hicisteis” (Mt 25,40).
P. Alwin Mascarenhas SVD
Coordinador de JPIC.