Mi nombre es Susan Noronha y vengo de una tierra de belleza pintoresca: la India. Amo a mi país porque India es una nación de unidad en diversidad, con personas que viven juntas de diversas religiones, castas y creencias.
Cuando era niña, crecí viendo a mi padre curar las heridas de leprosos en mi pequeño pueblo. Mi trabajo consistía en pasarle los hisopos de algodón. Para mí, mi padre era un héroe, pero él me abandonó poco después de celebrar mi décimo cumpleaños. Mi madre era maestra en la escuela parroquial y conocía a casi todas las familias del pueblo. Ella también fue generosa y todavía hoy yo puedo experimentar los frutos de esa generosidad. Ella también se fue y se unió con mi padre poco después de haber terminado mi escuela. Dios los tomó y a mí ni siquiera me dio tiempo de despedirme.
"Sigue respirando", me dije y empecé a vivir en una residencia de niñas, sumergida bajo miedos, traumas y rechazos. ¡Me desconecté completamente del baúl de mis tesoros! Días, meses y años pasaban y yo gemía en medio de mis dolores. Pero, poco a poco me sentía fortalecida cuando veía que me levantaba de mis caídas. ¡Pero esperaba la sabiduría!
Continué con mis estudios adicionales y después comencé a trabajar para una empresa. Poco después, me casé con un hombre maravilloso: Leo Chettiar, que no sólo es mi esposo, sino además un buen amigo. Y fue por aquel entonces cuando me di cuenta lo que yo tenía que hacer. Comprendí que mis padres, al irse, habían dejado en mí su huella indeleble. ¡De pronto supe que quería ser misionera! Así que dejé mi trabajo seguro y me uní a los Misionero Laicos del Verbo Divino (grupo de Socios Laicos SVD, en la Provincia de Mumbai). En dos ocasiones, en 2012 y en 2015, fui elegida como coordinadora de este grupo.
Los Misioneros Laicos del Verbo Divino participan de la misma espiritualidad trinitaria y misionera que la Congregación de los Misioneros del Verbo Divino (SVD) y las congregaciones hermanas (SSpS y SSpSAP). Esto nos motiva a estar enraizados en la comunión con la Palabra y comprometidos con su misión. Nuestras reuniones, retiros, salidas a las comunidades de misión y otros programas están orientados a formarnos como un movimiento de apoyo a la Familia Arnoldina. Siempre buscamos imitar los pasos de Jesús a través de un servicio compasivo y al compartir su Palabra. A través de los años, los Misioneros Laicos, hemos aprendido a apreciar la ejemplar vida y obra de San Arnoldo Janssen. Y en esta comunión, hemos descubierto los dones de Dios en nuestras propias vidas y siempre los hemos intentado compartir con los demás.
En octubre de 2017, fui elegida como la representante de los Misioneros Laicos de la sub-zona para asistir a un taller en Nemi, Roma. Durante el taller pudimos apreciar el inmenso valor de la interculturalidad, ya que todos éramos personas de diversas culturas, idiomas y naciones. Sin embargo, todos juntos pudimos celebrar la riqueza de la misma liturgia. Participar en ese taller me llenó de mucho entusiasmo para continuar ese trabajo de la misión en el mismo espíritu de San Arnoldo.
El año pasado, fui seleccionada por la zona de Asia para asistir al 18º Capítulo General de la SVD en Roma. El lema del Capítulo era: "El amor de Cristo nos urge (2 Cor 5,14), enraizado en la Palabra, comprometido con su misión". Por primera vez, en esta reunión, participaron cuatro laicos representando 4 movimientos laicos SVD a lo largo del mundo. Estuvieron: Patrice Rono representando África; Susan Noronha representando Asia; Sophie Wego representando Europa y Len Uhal representando el continente Americano. Los Misioneros Laicos no solo fuimos invitados a hacer presentaciones de nuestros trabajos, sino que también a participar en la agenda del Capítulo de la manera más completa posible, con la excepción de la votación. Al asistir a todas las sesiones del Capítulo, al participar en las excursiones y peregrinaciones, al echar porras viendo la copa de fútbol…, sin duda fuimos recibidos por los cohermanos SVD como verdaderos miembros de la familia Arnoldina.
Cada cuatro meses, los Misioneros Laicos publicamos un boletín en inglés y en español, en el que intentamos compartir noticias y eventos de las actividades de nuestros grupos. El equipo editorial está formado por: Susan Noronha (India), Matilda Anim-Fofie (Ghana), Laura Inés Díez Bilbao (España), Fabián Pagaduan (Filipinas), Gianini Sahagún Becerra (México) y Sophie Wego (Alemania). Este boletín se titula: “Socios Laicos de SVD”.
El ser misionero es un llamado que nos hace Jesús para que profundicemos nuestra propia fe y la compartamos con las personas que nos rodean. El ser misionero es un reto. La colaboración no siempre es fácil. Pero, estar abierto al diálogo siempre nos ayuda a superar los bloqueos de comunicación ya que juntos podemos hacer mucho. Y para terminar cito al nuevo General de la SVD: Paulus Budi Kleden, SVD, que dice: “Ayudémonos unos a otros a ser fieles a nuestro nombre: Misioneros del Verbo Divino porque nuestro nombre es nuestra misión”.
Por: Susan Noronha
Misionera Laica SVD de Mumbai, India